miércoles, 26 de septiembre de 2007

DERECHO A LA ALIMENTACIÓN EN GUATEMALA




Se ha iniciado la “Campaña por el derecho a la alimentación” en Guatemala. Claro está que esa campaña no empezó aquí, sino que se gestó milagrosamente en la inmaculada ONU, pasó por la noble OEA y luego se disfrazó de alma de Dios, encarnada en las organizaciones ACTIONAID y Save the children, las cuales, a su vez, la han convertido en “justo clamor” de las organizaciones guatemaltecas plataforma agraria y coordinadora nacional de organizaciones campesinas CNOC, dirigidas por los abnegados Omar Gerónimo y Leocadio Juracán, respectivamente, quienes ya parecen estar preparando las alforjas para llevar trigo a su molino, pues Juracán, líder de la CENOC, ni lerdo ni perezoso, afirmo inmediatamente que el problema de la mala alimentación de los chapines, se debe a una injusta distribución de la tierra cultivable, o sea que hay que arrebatársela a sus legítimos propietarios, para regalarla a los desposeídos. Misma cosa afirmó Arturo Echeverría, activista de ACTIONAID, pero con respecto a la riqueza que, tan a disgusto suyo, esta repartida en este país. No puedo sino imaginar lo ansiosos que deben estar, ambos activistas, de repartir equitativamente sus propias tierras y su propia plata (que si no las tienen ahora, talvez las tendrán pronto, si logran seguir “mamando al pie de la vaca”)

Lo aprendí de mis maestros libertarios y lo repetiré hasta el cansancio: no es con medidas asistencialistas y cortoplacistas que se logrará acabar con el hambre, sino con una fuerte inversión de capital que pueda crear fuentes de trabajo para que esas personas tengan dinero sudado y ganado dignamente y cubran con el, como mejor les parezca, sus propias necesidades, y eso solamente se logrará cuando los gobernantes entiendan que ese tipo de inversión (que no la puede hacer el estado) se consigue únicamente con el establecimiento de políticas impositivas y arancelarias que la favorezcan, haciéndonos atractivos a los ojos de los inversionistas, porque en este momento, para estar de merecer, no somos más que (y perdonen la figura) una tipa fea, tonta y por si fuera poco, llena de tufos y exigencias.

Permítanme, distinguidos lectores, hacer en este punto un breve paréntesis para plantear una pregunta ingenua: Si existe tal cosa como el “derecho a la alimentación” ¿Quien es ese buenazo que esta obligado a darme de comer, para ir corriendo a buscarlo con mi lista de supermercado? Y no pregunto por “techo digno”, “trabajo digno”, y demás “dignos bienestares” porque no son el tema.

Sigan el flujo de la plata y llegarán a la razón del súbito interés por las pobres almas desnutridas, que a mi parecer, no es otra cosa que la ayuda económica de la comunidad internacional que, como suele suceder, regalará el dinero de los ingenuos contribuyentes de cada país involucrado, para que corra alegremente por un camino de hoyas embarradas hasta llegar, después del “parte y reparte”, a los lugares “de muy alta vulnerabilidad alimentaria” (o sea, en buen chapín, a esos pobres muertos de hambre que, sin remedio, seguirán bien pisados)

Gustavo Abril





3 comentarios:

Ishtar Sylphide dijo...

hola, soy sylphide y me interesa mucho la realidad latinoamericana y todo lo que es vuestra sensibilidad y alabo esa soidaridad por el pueblo, espero que se vayan haciendo cosas. El problema alimentario es algo que se podría solucionar en los proximos años para siempre.

un beso,

sylhide.

Anónimo dijo...

De ninguna manera estoy en contra de la ayuda a los que están en calamidad, pero no podemos dar esa clase de asistencia todo el tiempo. Necesitamos soluciones sostenibles en el largo plazo. Las reformas agrarias jamás han dado buenos resultados...tampoco el asistencialismo.

Gracias por tu visita, Sylphide, y gracias por tus amables comentarios.

El Mapache

ProDerechoAlimentación dijo...

Hola a todos!!
solo les quiero comentar que recientemente nosotros creamos un blog porque también estamos interesados en ayudar un poco en pro del derecho a la alimentación, así que sean todos bienvenidos a este otro blog también... mientras más obremos, mejores resultados obtendremos.